Planta Monstera Deliciosa Variegata

CLIMA: La monstera blanca es una planta que crece entre los 1700 y los 2600 metros de altitud en climas templados y ambientes con  temperaturas que oscilen entre los 10 y los 30 grados centígrados. 

LUZ: Esta planta requiere exposición a luz solar indirecta durante 8 horas al día como mínimo. En ambientes de interior se recomienda ubicarla cerca de una ventana.

RIEGO: Esta especie requiere de riegos cada día de por medio cuidando de no generar encharcamientos en el sustrato. Es recomendable que esta labor se haga con una dilución al 10% de Humus líquido en agua.  Además,  sus hojas se deben rociar todos los días con agua usando un atomizador para mantener los niveles de humedad. El Sistema cantharus viene incluido con la compra de la planta y asegurará la irrigación de la cantidad de agua que tu monstera variegada necesita para su desarrollo. Lo único que debes hacer es revisar periódicamente que tenga agua en su interior. 

SUELOS: Esta planta requiere suelos sueltos, bien drenados y ricos en materia orgánica. Una buena opción es que siembres tu monstera variegada en el Sustrato para plantas de interior que hemos preparado en Sembramos con todos los requerimientos para el desarrollo óptimo de esta especie.

REPRODUCCIÓN: Su propagación se hace por medio de esquejes de hoja. Para esto es importante fijarse que el nudo en el que nace una hoja esté creciendo una raíz y con una tijera afilada se retira la hoja teniendo cuidado de no dañar la pequeña raíz, y se sumerge en agua durante 6 semanas. Pasado este tiempo en el cual la raíz se desarrollará, se siembra en una maceta pequeña. Otra forma de propagar esta planta es mediante la germinación de sus semillas. 

ABONO Y FERTILIZANTES: La monstera variegada requiere de suelos ricos en calcio por lo cual te recomendamos abonar con harina de huesos, que además aportará fósforo, un nutriente fundamental en la formación de frutos y flores sanas. Adicionalmente para garantizar que tenga un suministro constante de materia orgánica, te recomendamos hacer el riego con una dilución al 10% de humus liquido en agua. Esta especie es muy susceptible al ataque de insectos como el pulgón. El aceite de Neem mezclado con jabón potásico y agua es una buena alternativa para combatir esta plaga. Para preparar esta solución se debe diluir en un litro de agua de 5 a 10 mililitros de Aceite de Neem y Jabón potásico según el grado de infestación de la planta. Esta mezcla se aplica con un pulverizador en las hojas haciendo énfasis en el envés que es donde permanecen estos organismos. También puedes regar tu planta una vez por semana con una dilución de 3 mililitros de Aceite de Neem y Jabón potásico en un litro de agua. Esto fortalecerá el sistema inmune de la planta por lo que será más resistente al ataque de organismos patógenos.