Bonsái Portulacaria Afra

EL ARTE DEL BONSÁI

La palabra bonsái es una expresión japonesa que significa “árbol en bandeja”. En la práctica básicamente consiste en  llevar, mediante técnicas muy elaboradas, a la miniaturización de un árbol conservando sus características físicas. Sin embargo, para muchos esto es considerado un arte. Para entender de dónde viene esta práctica, hay que remitirse a la historia. Se han encontrado algunas evidencias de lo que serían formas primitivas de bonsáis, siendo las más antiguas las halladas en Egipto donde se han descubierto  pinturas que datan de hace cerca de 4000 años, en donde se representa el cultivo de árboles ornamentales en macetas talladas en barro, y se sabe que por orden de los faraones muchas especies eran transportadas y mantenidas en macetas para adornar jardines exteriores. En India se encontró un documento donde se describen técnicas para el mantenimiento de árboles enanos con fines medicinales, el cual puede ser considerado el precursor de lo que hoy se conoce como bonsái.  Posteriormente y de manera independiente, en China fue donde se sentaron las bases y el desarrollo de esta práctica, llevándola no solo a la miniaturización de árboles sino de paisajes enteros. Con la llegada del budismo zen  a Japón durante el siglo XII,  varios aspectos de la cultura fueron introducidos, entre otros el arte de los bonsáis que fue difundido entre toda la población. Fueron los japoneses quienes mejoraron y modificaron las técnicas chinas, creando lo que hoy en día se conoce como bonsái. Con la apertura de Japón al mundo en el siglo XIX, esta actividad artística llegó a Europa desde donde se difundió hacia el resto del mundo llegando a ser tan popular que hoy en día se practica en todo el mundo. Quienes practican el arte de hacer bonsái manifiestan que trae tranquilidad y ejercita el don de la paciencia.

PLANTA PORTULACARIA AFRA

Historia y curiosidades deL PORTULACARIA AFRA

Se dice que quien tenga esta especie en casa, nunca tendrá problemas de dinero y que la prosperidad lo acompañará. Quizás esta sea una de las razones por las que esta especie es tan popular entre los amantes de la jardinería. Sin embargo, esta especie cuenta con una serie de propiedades que la hacen muy interesante: por ejemplo su capacidad de absorber grandes cantidades de dióxido de carbono y otros contaminantes del aire produciendo grandes cantidades de oxígeno,

además, es una especie ideal para iniciar procesos de restauración ecológica en ambientes degradados en los que ayuda a que la biodiversidad aumente. 

Tradicionalmente, ha sido usada como especie medicinal, alimenticia y de forraje para el ganado. 

ORÍGENES DEL PORTULACARIA AFRA

La familia Didieraceae agrupa a 22 especies repartidas en 7 géneros, las cuales se distribuyen en el sur de África y la isla de Madagascar. Esta familia se caracteriza porque sus especies son de hábitos arbustivos o arbóreos que pueden alcanzar hasta 20 metros de altura. Pertenecen al grupo de las denominadas plantas suculentas, debido a que sus hojas y tallos están adaptados para almacenar agua. 

Algunas especies presentan espinas y tienen formas muy similares a la de algunos cactus, de hecho pueden llegar a confundirse. Sin embargo las Didiereaceae no presentan areolas, estructuras que son exclusivas de los cactus.

El género Portulacaria agrupa a dos especies nativas de Sudáfrica, que se caracterizan por presentar tallos y ramas robustas, y hojas ovaladas de las que se alimentan elefantes, rinocerontes y animales de corral. Son muy apreciados por su resistencia, y por su belleza estética, razón por la que actualmente son cultivados como ornamental y recientemente se ha popularizado su uso como especie de bonsái.

CARACTERÍSTICAS DEL PORTULACARIA AFRA

Es un árbol mediano que puede alcanzar hasta 7 metros de altura. Se caracteriza porque su tronco, ramas y hojas tienen la capacidad de almacenar agua, por lo que son estructuras blandas y suculentas. Su tallo es  de color café y se ramifica muy cerca de la base. Sus hojas, que recuerdan por su forma a una pequeña moneda, son ovaladas, carnosas, de bordes enteros, textura lisa y color verde oscuro, aunque si se exponen al sol intenso pueden tornarse rojizas; crecen de forma opuesta y se distribuyen en la rama en forma de cruz. Sus flores son pequeñas, de color rosado y se agrupan en inflorescencias muy llamativas que crecen al final de las ramas.  

USOS DEL PORTULACARIA AFRA

Se cultiva principalmente como ornamental en jardines y macetas, aunque recientemente se ha popularizado como especie bonsái por su resistencia, versatilidad y agradable estética. Sin embargo, en Sudáfrica, de donde es nativo, ha sido utilizado en proyectos de restauración ecológica de ambientes degradados por la ganadería y la agricultura obteniéndose  muy buenos resultados por su capacidad de capturar carbono de la atmósfera. Además, se ha demostrado que en los lugares donde llega presentan un incremento de la biodiversidad nativa.

Según la literatura, esta especie tiene propiedades medicinales, por lo que es utilizada para tratar el dolor de garganta, infecciones bucales y problemas de la piel. Sus hojas se consumen frescas en ensaladas a las que aportan un sabor amargo y son ideales para combatir la sed y la deshidratación.